sábado, 28 de enero de 2012

Un mal día

Tras aquella estampa me encontraba impotente, no sabía qué hacer, no podía reaccionar, yo había hecho esa salvajada, no debería haber pasado pero los nervios, la tensión, el agobio, un mal día para enfadarme. Intente contenerme por todos los medios, sabía que si explotaba acabaríamos mal, muy mal, por eso luchaba contra la bestia que quería salir, luchaba por atar mis puños a mi cuerpo.
Lamentablemente la bestia fue más fuerte, no lo pude evitar, se liberó, fue un lunes, fue un mal día y es que solo se necesita un mal día para volver al mejor de los hombres un demente. 


sábado, 7 de enero de 2012

Es difícil.


El día de ayer fue complicado, el de mañana probablemente también lo será, la vida en si es difícil. Desde que nacemos cada hora es una pequeña prueba que debemos librar. Todos los días tenemos que superarnos a nosotros mismos. La gente, cuanto más tiempo pasa, más nos exige. La abrupta vida y sus pruebas.

 La abrupta vida no nos da respiro pero podemos soñar con la vida perfecta. Hagamos nuestra vida, disfrutemos de ella, no malgastemos ni un segundo, debemos aprovechar hasta el momento más simple con una persona para hacer de ese momento, uno digno de recuerdo. Vivamos la vida a nuestro modo.